Pintura Acuarela Changmarín 1992
Caminando la llanura
en la distancia se pierde,
con un horizonte verde
donde empieza la espesura.
Se mece la arboladura
de una palmera sombría.
Se rompe la luz bravía
del sol en el caserío.
Pasa quejumbroso el río.
ESTA
AZUL LA SERRANIA.
Va aleteando una parvada
de negras aves marinas.
En las peladas colinas
canta la perdiz echada.
La tarde corre cansada.
El perro juega contento
y brama el toro violento
en la cárcel del corral
entre el viejo naranjal
TOCA
LA GUITARRA EL VIENTO
El sol prende sus hogueras
en el fogón del ocaso,
y saltan rojos chispazos
encima de las palmeras.
Vagan nubes pasajeras
en las barcazas del viento.
Se oye lejos el lamento
de la gente salomando.
De chispas se va llenando
EL
CIELO EN SU FIRMAMENTO.
Por el camino, gritando
Vienen los trabajadores
De sus lejanas labores;
Se va la tarde acabando.
Una paloma cruzando
Traza un rumbo en su agonía,
y por aquella lejanía
corre una cabalgadura
de noche, la sierra oscura
SE
LLENA DE FANTASÍA